Producción

El productor de cine supone el empresario cinematográfico, representante legal de la obra, contratista del personal, cineastas y contables. Decide los aspectos financieros de la financiación y la distribución. Contrata el equipo artístico, técnico y administrativo. Su departamento se divide en diferentes funciones que representan otros cargos dependientes. El productor ejecutivo es el responsable empresarial y bajo su responsabilidad el coproductor, productor asociado, jefe de producción externo, gerente de producción, coordinador de producción, productor de campo y asistentes de producción.

Las fases de la función del departamento de producción se dividen en la etapa de la pre- preproducción, con los preparativos del rodaje, elección del director de la película, guionista e intérpretes más importantes. A su vez se desglosa el guion y se analizan los aspectos necesarios para el proyecto. Esto será gestionado por el director de producción, junto al material, transporte y localizaciones. Se planifican las unidades de rodajes en función de los escenarios, se contrata el equipo técnico y planifica la economía de medios y la financiación para que todo esté listo para el rodaje.

Por su parte durante el rodaje el departamento de producción establecerá soluciones a las diferentes necesidades que se planteen mientras comprueban los gastos generales.

En la posproducción se finalizan los contratos de reparto y equipo técnico y se centrará en financiar el aspecto de edición montaje y resultado final del filme, así como la gestión de copias, distribución y su comercialización.

En los departamentos de producción, desde diferentes orígenes y experiencias vitales diversos españoles pudieron realizarse como productores. En aquellos cuadros de trabajo del departamento fueron conformándose gremios de compatriotas en los que se desarrolló el fenómeno comentado. Productores españoles exiliados en México fueron Federico Amérigo, Fortunio Fernández Bonanova, Nicolás Olmo o Enrique Rodríguez.